3
Soñándote a ti mismo serás tu sueño.
Suéñate, pero despierto.
Luego olvida los pensamientos:
tu acción se transformará en la no acción.
El zorro no premedita, acecha,
y salta sobre la presa en el momento oportuno.
De modo que si pretendes ganar nunca elijas
porque el saber habla de ti o no habla
sin que haya vacilación.
esto lo aprendí en mis estrujamientos,
un cavilar nocturno escribir fino, lixiviar ceniza,
quemarme los ojos en vista de todo.
Acércate a la mesa como idiota,
como si estuvieras ajeno a todo
y coloca la apuesta donde tu corazón diga ¡Ah!
Pero mejor olvídate,
apártate de estas palabras.
El fuego de lo desconocido se alimenta con mariposas.
Jorge Leónidas Escudero
No hay comentarios:
Publicar un comentario