martes, 30 de junio de 2015


LA CONQUISTA DE LA INOCENCIA

Resulta que soy un niño, 
que todo 
ha ido haciéndome un niño, 
que el sufrimiento y la alegría me han hecho un niño, 
que como un niño 
todo lo he ido transformando en sueños, 
jugando con mis sueños y con mis versos, 
resistiendo con ellos, 
que contemplar todos los mundos me ha hecho un niño, 
que yo iba como todos para ser un hombre 
y las fronteras me han hecho un niño, 
los fingimientos y los límites: 
todo me ha hecho un niño; 
que la locura me ha hecho un niño, 
verla, palparla, 
a través de todos los disfraces y de todas las máscaras, 
que el asalto de la razón a todo lo que vive 
me ha hecho un niño, 
que sorprenderme por todo me ha hecho un niño, 
desear un vivir que sobre todo fuera una aventura, 
que me ha hecho un niño 
el engaño de cuantos han crecido, 
que les hacían hombres 
las trampas de los dominantes, 
que dejas de ser niño cuando te conviertes en dominante, 
que el dominio de las abstracciones me ha hecho un niño, 
que al parecer eso es ser hombre, 
que he preferido ser un niño 
para salvar todo lo creativo, 
que mi mundo 
no es de este reino perdido, 
para dar a los sentidos lo que es de los sentidos, 
al instinto lo que es del instinto, 
que los sueños me han hecho un niño, 
que no podía vivir si no era un niño 
que me ahogaban las órdenes y las leyes. 
Resulta que muchos de los que se hicieron hombres 
y no buscaron la inocencia, 
al final de sus vidas 
recuerdan con nostalgia lo que tuvieron de niño, 
porque a ser hombre llaman 
vivir en un mundo de dominantes 
y sometidos, 
que la soledad me ha hecho un niño, 
que el darlo todo y el haberlo perdido 
me ha hecho un niño, 
que he sido un poeta maldito porque soy un niño, 
que me ha hecho un niño 
ver que lo único importante 
es buscar la inocencia entre la astucia, 
que cuando he amado 
me he convertido en un niño, 
que comprender que hay víctimas pero no culpables 
me ha hecho un niño, 
que por ser un niño 
mantengo la ilusión a pesar de los desencantos 
y de la sangre derramada 
entre las trampas y los mitos, 
que ver cómo caemos todos en las innumerables trampas 
me ha hecho un niño, 
y que de no ser un niño 
nunca hubiera nacido en mí la rebeldía, 
que es preciso 
comenzar a rebelarse a uno mismo, 
no seguir la consigna de ser un hombre, 
que soy poeta porque conquisto la inocencia 
cada vez que abro los ojos y contemplo las cosas, 
que a ser niño 
es lo único que he aprendido 
y porque observo que todos los seres 
con el mismo destino: 
nacer para la muerte, 
no dejan de ser niños: 
que un pájaro siempre es un niño, 
que un árbol siempre es un niño, 
que un perro siempre es un niño. 
Y porque pienso qué es un hombre 
si deja de ser niño, 
que se equivocan las escuelas 
que intentan hacernos hombres 
prometiéndonos falsos paraísos, 
que la anarquía sólo será posible 
cuando todos fuéramos niños, 
cuando todos partamos 
a la conquista de la inocencia, 
que escribo este poema 
porque resulta que soy un niño…

Jesús Lizano

LA COLUMNA POÉTICA

Versos
en lugar de soldados,
olivos en lugar de mástiles,
fiestas, no trincheras,
no fusiles,
estrofas,
flores en lugar de banderas,
jardines,
no cercos, no checas,
no uniformes,
poemas,
ingenuos en lugar de espías,
libertad, no victoria,
verso libre en lugar de reglas,
molinos en lugar de gigantes,
niños con piel de hombre,
no asesinos
con piel de justicieros,
romances en lugar de estrategias,
alas
para las mentes, no rejas,
aventuras,
en lugar de tácticas,
liras, no tambores,
personas curvas, no personas rectas,
no intriga,
música,
sueños en lugar de rádares,
coplas, no discursos y arengas,
viajes, no desfiles,
licencias poéticas,
no reclutamientos,
no fronteras,
soñadores,
no dominantes y dominados,
la conquista de la inocencia
no la conquista del mundo,
nocturnos, no dianas,
no sectas, no mafias,
únicos y compañeros,
no grandes parlamentos,
pequeñas asambleas,
odas,
cánticos,
no juicios, no trompetas,
ideas al servicio de las vidas,
no vidas 
esclavas de las ideas,
de sus profetas,
románticos,
no jefes y subalternos
(¡plaga
de jefes y subalternos!),
líricos,
no fanáticos,
contemplación
no ordeno y mando.
¿Cómo?
¿Cuándo?
¡Adelante la columna poética! 

Jesús Lizano

lunes, 29 de junio de 2015


Árbol de niebla 

¿De dónde esta tristeza que me llega
cómo un último amor,
como la débil rebelión de la tierra
por sus lluvias,
por las lianas azules de sus nieblas?
No sé si de la muerte de aquellas dulces hojas
en las que el viento busca todavía
La pálida ternura del estío.

No sé si de ese día en que el otoño
abandonó su rostro sobre un río
perdido en la congoja.

No sé desde qué cielo tanta sombra
asomada a mi pecho entre la pampa
cuando mi vida vuelve como el llanto
a su antiguo paisaje, a sus antiguas voces
que crecen como hiedra desde el sueño.

¿Cómo no amar entonces
la libertad tan triste de los médanos,
el deseo de mar con que se duermen
mirando hacia otro cielo,
donde el recuerdo tiene solamente
la eternidad del trébol?

¿Cómo no amar la angustia de las piedras,
sometidas sin lucha
al inútil retorno de la hierba
al invencible polvo,
a ese lejano muro donde el tiempo
se disgrega desnudo, sosteniendo
las huellas de mis manos?

Alguien me llama aún por sus desiertos
por el aire sombrío que se inclina
al desolado oeste;
mientras yo estoy aquí
con mis pequeñas muertes como un árbol
esperando el olvido.

Olga Orozco


Quiero un poema sencillo y bueno

Quiero un poema sencillo y bueno
como el pan
caliente y oloroso
con ese olor de gente,
de harina,
de manos amasando
y de un gran fuego rojo en el cielo del horno.

Quiero decirte: Ven
mi pan es tuyo.
¿No ves qué manos lo amasaron?
¿No ves que un mismo amor lo ha cocido
y que mis manos y las tuyas
estuvieron juntas en la panadería?
¿No ves que venimos amasando pan
desde el primer grano que sembramos?

Michèle Najlis

domingo, 28 de junio de 2015


Fragmentos de La máscara de la anarquía

¿Qué es la Libertad? …podéis decir
igualmente, qué es la esclavitud…
Porque su verdadero nombre ha crecido
hasta un eco de vosotros mismos.

Es trabajar para un sueldo que
sólo os permita tirar adelante en vuestros hogares
en el día a día, como en una celda,
dejando que los tiranos disfruten todos los placeres de la vida.

Así para ellos aceptáis la sumisión
telar y arado y espada y pala,
queráis o no, os curváis
para su defensa y alimento.

Es ver a vuestros débiles hijos
con sus madres languideciendo y sufriendo,
cuando los vientos invernales son melancólicos…
vuestros hijos están muriendo mientras hablo.

Es codiciar por una comida
que el hombre rico en su jolgorio
arroja a los rollizos perros que
se atiborran bajo su mirada;

es dejar que el Fantasma del Oro
tome del Trabajo mil veces
más de lo que podría su riqueza
en las tiranías del pasado.

Los billetes… esta falsificación
de títulos de propiedad, a los que
atribuís algo de valor
de la herencia de la Tierra.

Es sentirse esclavos por dentro
y no tener un control firme
de la propia voluntad,
ser como a uno le hacen los demás.

Y al final, cuando os quejáis
con un leve murmullo y en vano
es ver a los súbditos del tirano
aplastar a caballo a vuestra esposa y a vosotros mismos…
La sangre nutre la hierba como el rocío.

Entonces es sentir la venganza
que ansía ferozmente intercambiar
sangre por sangre e injuria por injuria…
No hagáis esto si sois fuertes.

Esto es la Esclavitud. Hombres salvajes
o bestias feroces en una madriguera
no habrían sufrido tanto como vosotros.
Pero jamás conocieron semejantes adversidades.

¿Qué eres, Libertad? ¡Oh! ¡Pudieran los esclavos
responder a esta pregunta desde sus tumbas!
Los tiranos huirían
como sombras borrosas.

Hágase una gran Asamblea
de los intrépidos y los libres
en alguna parte del territorio inglés
donde las llanuras se extiendan con amplitud.

El cielo azul en lo alto,
la verde tierra sobre la que camináis
todo lo que es eterno
será testigo de la solemnidad.

Vosotros, que sufrís penas indecibles
porque sentís o veis
vuestro miserable país comprado o vendido
y pagado con sangre y oro…

Hágase una enorme asamblea
donde, con gran solemnidad,
se declare con palabras ponderadas
que sois, tal y como Dios os hizo, libres.

Y estas palabras se convertirán entonces
en el destino estruendoso de la Opresión
que late en cada corazón y cerebro
más… más… y más…

Humanos, levantaos como los leones
después de un sueño profundo
en un número invencible,
dejad caer al suelo vuestras cadenas,
que durante el sueño se hayan posado
sobre vosotros, como el rocío.

Vosotros sois muchos, ellos son pocos.

Percy Bysshe Shelley


...No hay pájaro que vuele demasiado alto si lo hace con sus propias alas...
...Las prisiones se construyen con piedras de Ley; los burdeles 
                      con ladrillos de religión...
...El perfeccionamiento traza caminos rectos; pero los torcidos y sin perfeccionar son los caminos del Genio...

William Blake

De Proverbios del infierno 



Carne inmortal 

Yo le tengo horror a la muerte.
Mas a veces cuando pienso
Que bajo de la tierra he de volverme
Abono de raíces,
Savia que subirá por tallos frescos,
Árbol alto que acaso centuplique
Mi mermada estatura,
Me digo: -Cuerpo mío:
Tú eres inmortal.
Y con fruición me toco
Los muslos y los senos,
El cabello y la espalda,
Pensando: ¿Palpo acaso
El ramaje de un cedro,
Las pajuelas de un nido,
La tierra de algún surco
Tibio como de carne femenina?

Y extasiada murmuro:
-Cuerpo mío: ¡estás hecho
De sustancia inmortal!

Juana de Ibarbourou

El estado poético 

Estás en la ventana y cuando creías
haber perdido todo olvidado todo
no ser nadie ni nada
sin cara o manos para tocar ninguna cosa
he aquí que el llamado suena y oyes la voz
y anochece en un cielo verde como un árbol.

Juan José Saer

Juan José Saer, en Papeles de trabajo. Borradores inéditos I, p. 293

jueves, 25 de junio de 2015

lunes, 22 de junio de 2015


EN LA ISLA A VECES HABITADA

En la isla a veces habitada de lo que somos,
hay noches, mañanas y madrugadas
en que no necesitamos morir.
En ese momento sabemos todo lo que fue y será.
El mundo se nos aparece explicado definitivamente
y entra en nosotros una gran serenidad,
y se dicen las palabras que la significan.
Levantamos un puñado de tierra
y la apretamos en las manos. Con dulzura.
Allí está toda la verdad soportable:
el contorno, la voluntad y los límites.
Podemos en ese momento decir que somos libres,
con la paz y con la sonrisa de quien se reconoce
y viajó alrededor del mundo infatigable,
porque mordió el alma hasta sus huesos.
Liberemos sin apuro la tierra donde ocurren milagros
como el agua, la piedra y la raíz.
Cada uno de nosotros es en este momento la vida.
Que eso nos baste.

José Saramago

Maravillosa grabación perdida de "Wish you were here" de Pink Floyd junto al genial violinista Stéphane Grappelli

Una toma alternativa del inmortal tema "Wish You Were Here" de Pink Floyd interpretado al violín por el virtuoso Stephane Grappelli fue grabada en 1975, se pensaba que la toma ya no existía, que por despiste habían grabado sobre ella pero afortunadamente, para alegría de tantos y tantos de nosotros y para la música en general, se descubrió que la versión no había sido borrada, que se había salvado. 
Fue publicada en 2012 en Pink Floyd: Reissue Project.



domingo, 21 de junio de 2015


TIEMPO DEL HOMBRE

La partícula cósmica que navega en mi sangre
Es un mundo infinito de fuerzas siderales.
Vino a mí tras un largo camino de milenios
Cuando, tal vez, fui arena para los pies del aire.

Luego fui la madera, raíz desesperada.
Hundida en el silencio de un desierto sin agua.
Luego fui caracol, quién sabe dónde.
Y los mares me dieron la primera palabra.

Después, la forma humana desplegó sobre el mundo
La universal bandera del músculo y la lágrima.
Y brotó la blasfemia sobre la vieja tierra.
Y el azafrán, y el tilo. La copla y la plegaria.

Entonces vine a América para nacer un Hombre.
Y en mí junté la pampa, la selva y la montaña.
Si un abuelo llanero galopó hasta mi cuna,
Otro me dijo historias en su flauta de caña.

Yo no estudio las cosas, ni pretendo entenderlas.
Las desconozco, es cierto, pues ante viví en ellas.
Converso con las hojas en medio de los montes
Y me dan su mensaje las raíces secretas.

Y así voy por el mundo, sin edad ni Destino.
Al amparo de un cosmos que camina conmigo.
Amo la luz, y el río, y el camino, y la estrella.
Y florezco en guitarras, porque fui la madera.

Atahualpa Yupanqui



Kalyn Hawkins,de la serie Thanatopsis







Paseo al atardecer

Camino tarde por senderos polvorientos,
las sombras de los muros caen oblicuamente,
y puedo vislumbrar a través de los sarmientos
la luna sobre sendas y arroyos silentes.
Canciones que un día entonara en el pasado,
entono una vez más, con acento cansino,
y las sombras infinitas de lo que he viajado
se cruzan e interponen en mi camino.
El viento, la nieve y el calor solar
de muchos años, tras de mí resuenan,
noches de verano y azul relampaguear,
tormentas e incomodidades que apenan.
Con la piel tostada y del todo invadido
por el esplendor del universo entero,
siempre hacia adelante me siento atraído,
hasta que las sombras cubren mi sendero.

Hermann Hesse


Vida de una flor

Por la verde ronda de hojas ya se asoma 
con temor infantil, y apenas mirar osa; 
siente las ondas de luz que la cobijan, 
y el azul incomprensible del cielo y del Verano. 
Luz, viento y mariposas la cortejan; abre, 
con la primera sonrisa, su ansioso corazón 
hacia la vida, y aprende a entregarse, 
como todo ser joven, a los sueños. 

Más ahora ríe toda, arden sus colores 
y en su cáliz asoma ya el dorado polen; 
aprende a sentir el calor del mediodía 
y, agotada, se inclina al lecho de hojas por la tarde. 

Labios de mujer madura con sus bordes, 
donde las líneas tiemblan por la edad ya presentida. 
cálida florece al fin su risa, en cuyo fondo 
amarga caducidad y hastío anidan. 

Pero ya se ajan y reducen los pétalos, 
ya cuelgan pesadamente sobre las semillas. 
Palidecen los colores como espectros: el gran 
secreto envuelve ya a la moribunda.

Hermann Hesse


Light of Iris,Georgia O'Keeffe




En la niebla

¡Qué extraño es vagar en la niebla!
En soledad piedras y sotos.
No ve el árbol los otros árboles.
Cada uno está solo.

Lleno estaba el mundo de amigos
cuando aún mi cielo era hermoso.
Al caer ahora la niebla
los ha borrado a todos.

¡Qué extraño es vagar en la niebla!
Ningún hombre conoce al otro.
Vida y soledad se confunden.
Cada uno está solo.

Hermann Hesse

jueves, 18 de junio de 2015


"¿Qué es esto que me aprieta el pecho? ¿Mi alma que quiere salir a lo infinito,o el alma del mundo que quiere entrar en mi corazón?"

Rabindranath Tagore

lunes, 15 de junio de 2015


SILENCIO

Conozco una ciudad
que cada día se llena de sol
y todo es robado en ese momento

Me fui una noche

En el corazón perdura
el estridor de las cigarras

Desde el barco
barnizado de blanco
he visto
mi ciudad desaparecer
dejando
un poco
un abrazo de luces en el aire turbio
suspendidas

GIUSEPPE UNGARETTI


TU BELLEZA ES AHORA

Por salvarte casi no te vi
en tu plateado brillo al sol
sobre la sirga, culebrita
dormida, cuando mi Talita
saltó hacia vos y lo esquivaste
ruda y tu belleza es ahora
vívida y brillante y perdida
en la cabeza de otra, esa
que te sueña...

DIANA BELLESSI

viernes, 12 de junio de 2015


El arte de narrar

Llamamos libros
al sedimento oscuro de una explosión
que cegó, en la mañana del mundo,
los ojos y la mente y encaminó la mano
rápida, pura, a almacenar
recuerdos falsos
para memorias verdaderas.
   Construcción
irrisoria, que horadan los ojos del que lee
buscando, ávidos, en el revés del tejido férreo,
lo que ya han visto y que no está
    Porque estas horas
de decepción, que alimenta la rosa
del porvenir donde la vieja rosa marchita
persevera, no quedarán
tampoco entre sus pétalos,
flor de niebla, olvido hecho de recuerdos retrógrados,
rosa real de lo narrado
que a la rosa gentil de los jardines del tiempo
disemina
     y devora.

Juan José Saer

De duelos largos

De duelos largos emerjo,
adormecido,a muertes frescas.
Sol cegador,alguna vez
fuiste fiesta y verdad única
-quién lo diría
de esta luz indiferente en la que,ya sin voz,
como flor en la lluvia,
me deshago.

Juan José Saer

Parras de las parrillas

Parras de las parrillas
que la luna acribillaba.
En plena noche
¿no es cierto?
alguna voz resonó. La luna,ella,
persiste,pasa lenta
sobre esas ciudades. No rocen,
ni despierten,lo que está ahí:
la ignorancia de este ahora
o el peso,tan frágil,mejor,
de su propio ser,al que el recuerdo,
inadecuado,no accede,
porque no es de ese pan
de eternidad 
que come la memoria.

Juan José Saer



No tocar

Que no digan que el comentario
acicala,ni que la condecoración,
seguida de fajos,vuelve,después de lustros pálidos,
reales. La gracia estaba en cabalgar,
con voz luminosa,el instante encabritado,
por puro lujo o gusto claro,o por ver
si se podía,contra el desgaste,labrar
formas que recordasen,con su sabor,
la miel de las mañanas. Que no vengan,
con su honor,a envenenarnos,ni,con sus
dardos de academia,a ponernos,
después de tanto mirar el sol de frente,
llamándonos,arteramente,suyos,
del lado de lo oscuro.

Juan José Saer


Ah, esta tarde encendida

Ah, esta tarde encendida, amigos, esta tarde,
de un oro vegetal iluminada toda
y toda penetrada de la gracia celeste
qué dulce, ah, qué dulce! entre el follaje frágil:
lluvia pálida o fluido casi primaveral
con una muy secreta y fragante nostalgia
de alma. Luz celeste y sensible mirando
entre la irradiación de la muerte suntuosa.
...Fue en Abril, sí, en Abril, en los primeros días
en que empieza a reinar un orden aún tierno
en las cosas. Venía distraído. De pronto
al volver de una esquina suburbana aquel árbol
me sorprendió con una presencia tan perfecta,
tan acabada, que, en un milagro hube
de creer. Parecía destacado con un
equilibrio, un ritmo, del todo musical,
en la plenitud grave y frágil de sus formas.
Y todo al punto se ordenó en torno de él
en una paz que hubiera madurado el sensible
pensamiento latente ya del mediodía.

Juan Laurentino Ortiz 

El secreto

consiste
en construir
mediaciones
para el trato
con el desierto
máquinas
de palo y livianas
rudimentarias
que defiendan
que den sombra
aunque nada nos libre
del sol
de la memoria
y otros deduzcan
de tan ardua prolijidad
como una llama negra
continua
nuestra locura

 Juan José Saer

miércoles, 10 de junio de 2015


 Pasión

Unos besan las sienes, otros besan las manos,
otros besan los ojos, otros besan la boca.
Pero de aquél a éste la diferencia es poca.
No son dioses, ¿qué quieres?, son apenas humanos.
Pero encontrar un día el espíritu sumo,
la condición divina en el pecho de un fuerte,
¡el hombre en cuya llama quisieras deshacerte
como al golpe de viento las columnas de humo!
La mano que al posarse, grave, sobre tu espalda,
haga noble tu pecho, generosa tu falda,
y más hondos los surcos creadores de tus sesos.
Y la mirada grande, que mientras te ilumine
te encienda al rojoblanco, y te arda, ¡y te calcine
hasta el seco ramaje de los pálidos huesos!

Alfonsina Storni



Van pasando mujeres

Cada día que pasa, más dueña de mí misma,
sobre mí misma cierro mi mirada interior;
en medio de los seres la soledad me abisma.
Ya ni domino esclavos ni tolero señor. [...] 

Alfonsina Storni

Capricho 2

Escrútame los ojos sorpréndeme la boca,
sujeta entre tus manos esta cabeza loca;
dame a beber veneno, el malvado veneno
que moja los labios a pesar de ser bueno.

Pero no me preguntes, no me preguntes nada
de por qué lloré tanto en la noche pasada;
las mujeres lloramos sin saber, porque sí.
Es esto de los llantos pasaje baladí.

Bien se ve que tenemos adentro un mar oculto,
un mar un poco torpe, ligeramente oculto,
que se asoma a los ojos con bastante frecuencia
y hasta lo manejamos con una dúctil ciencia.

No preguntes amado, lo debes sospechar:
en la noche pasada no estaba quieto el mar.
Nada más. Tempestades que las trae y las lleva
un viento que nos marca cada vez costa nueva.

Sí, vanas mariposas sobre jardín de Enero,
nuestro interior es todo sin equilibrio y huero.
Luz de cristalería, fruto de carnaval
decorado en escamas de serpientes del mal.

Así somos, ¿no es cierto? Ya lo dijo el poeta:
deseamos y gustamos la miel en cada copa
y en el cerebro habemos un poquito de estopa.

Bien. No, no me preguntes. Torpeza de mujer,
capricho, amado mío, capricho debe ser.
Oh, déjame que ría. ¿No ves que tarde hermosa?
Espínate las manos y córtame una rosa.

Alfonsina Storni